Elegí este hotel para asistir a una cita de trabajo debido a que ofrecía una sala de conferencias con tecnología de última generación para hasta 20 personas. El personal fue muy amable y atento durante mi estancia, y la ubicación cerca de la estación de tren y autobús fue muy conveniente para moverme por la zona.

La única cosa que eché de menos para mi trabajo fue la falta de una heladera en la habitación. Hubiera sido útil poder guardar algunos documentos importantes en frío.

El hotel era un gran lugar para, además gozaba de una zona tranquila, cerca de las atracciones turísticas y de la estación central de autobuses. Habitaciones con una alfombra. Los desayunos aquí eran de gran relación calidad-precio, con un café muy rico y también ensalada de frutas frescas. La ubicación era increíble y el parking público estaba cerca. Y es que estaba a un paso de Syrtaki, comí allí un par de veces. El servicio era estupendo, imposible no notarlo. Me dieron salida tardía, muy bonito de su parte.

Las habitaciones del Ghotel Hotel & Living Koblenz son increíbles. Están equipadas con todo lo que necesitas, como aire acondicionado, televisión de pantalla plana con canales Sky gratuitos y un baño privado con ducha. Me encanta la comodidad de las camas y el espacio de trabajo funcional. Como huésped, me siento realmente relajado y bien atendido aquí.

Aunque las habitaciones son muy cómodas, el único aspecto que no me convenció del todo es el sistema de calefacción. A veces sentía que la habitación estaba un poco fría.

Desayuno con ensalada de frutas frescas y un café muy rico: )

Estuve alojado en el Ghotel Hotel & Living por una semana para hacer turismo en la zona. El hotel es moderno y las habitaciones son espaciosas. El desayuno es bueno, con una gran variedad de opciones. Además, el hotel cuenta con un parking público debajo del edificio, con plazas reservadas para los huéspedes. A pesar de estar al lado de la estación de trenes y autobuses, no hubo problemas de ruido o molestias durante mi estancia en el mes de julio.

Lo recomiendo.

Hotel muy nuevo, confortable, frente a la estación de ferrocarril, a un paseo de 10 minutos al centro, personal atento, recomendable.

Una habitación ordenada e impecable con un baño, aire acondicionado y además refrescos. Una atención al cliente estupenda.

¡Increíble estancia! ¡El desayuno es de otro nivel, con una selección variada y deliciosa! Las habitaciones son amplias y cómodas, a pesar de la falta de espacio para las maletas. ¡La ubicación es perfecta, cerca de la estación de tren y del centro histórico! El personal es súper amable y profesional, ¡incluso encontramos a alguien que hablaba español! Recomiendo este hotel sin duda alguna.

El lugar era fantástico y el restaurante excelente. Habitaciones con un baño. El personal del hotel estaba listo para ayudar. Los desayunos aquí eran de gran relación calidad-precio, con tanto ensalada de frutas frescas como un café muy rico.

Hotel que cumple solo para estar de paso por un dia, nosotros tomabamos el crucero por el rhin y dormimos en la noche y para esto esta bien

Tienen un excelente desayuno variado y habitaciones grandes. Está cerca de la estación de trenes y hay varias líneas de colectivos que te llevan al centro histórico. El recepcionista fue muy amable y profesional. Merece la pena por su calidad y comodo parking. 🌟

Muy limpio, cómodo y al lado de la estación de tren.

El hotel se encuentra en una ubicación conveniente cerca de la estación de trenes y autobuses, lo que proporciona facilidad de transporte para los huéspedes. Las habitaciones son espaciosas y limpias, con ropa de cama impecable y toallas frescas. El personal es amable y atento, ofreciendo información útil a los visitantes. Además, el desayuno es delicioso y se puede disfrutar de un agradable paseo por la orilla del río Rin.

El servicio de internet gratuito no es confiable y puede ser frustrante para aquellos que necesitan una conexión estable.

Hotel nuevo y de diseño funcional. Situado junto a las estaciones del tren y de autobús, pero sin ruidos. Se podía aparcar sin dificultad en las proximidades a partir de las 19 horas y desayunar, por poco dinero, en las estaciones citadas (2,60 euros en la estación de ferrocarril). El personal del hotel muy amable. Las instalaciones, escasas, son excelentes. Parece más un hotel de cuatro que de tres estrellas. La distancia al centro de la ciudad andando, unos quince minutos.

Internet no gratuíto. No obstante, en recepción, nos ayudaron a hacer la tarjeta de embarque y a imprimirla sin cargo alguno.El desayuno demasiado caro. Falta de sábanas para taparse (sólo había nórdicos demasiado calurosos).

Las habitaciones son espaciosas y cómodas. El desayuno es bueno y variado.El personal es amable y atento.El hotel se encuentra en una zona tranquila y cuidada.El parking está situado debajo del hotel.

Nada que disguste.